Puertas principales, el paso a nuevas experiencias.

La apertura de la puerta principal de una casa marca el preámbulo de muchas sensaciones, sentimientos y experiencias, abrirla da la bienvenida a los visitantes, es la antesala a la presentación de uno de los maximos logros que puede tener una persona en su vida como lo es su casa, es el permiso para conocer más íntimamente las personas, su familia o su estilo de vida.

Recientemente los arquitectos han entendido esta combinación de sensaciones y experiencias, con lo que han buscado darle a la entrada en general, y en particular a las puertas principales, una categoría que sea consecuente con los efectos que tiene para las personas el hecho de pararse en frente de una puerta principal, experimentando diferentes sensaciones en el momento en que se abre y revela un nuevo mundo para el visitante débelando el motivo de orgullo del propietario.

Además de esta interpretación, también las puertas de entrada son la impronta inequívoca del estilo del arquitecto, siendo la indicadora a su vez, del estilo general del proyecto donde se pretende generar una primera idea, que describa lo que será el interior de los espacios. Por eso, para lograr ese protagónismo se apoyan en sus dimensiones y en la utilización de materiales mezclados, entre madera y metal para darle la estabilidad a la estructura de la puerta, acabados y sistemas de instalación variados.

Como lo hemos mencionado, uno de los aspectos para lograr el protagonismo son las dimensiones de las puertas que algunas veces supera los 3 mts de altura y más, y medidas como 1.20 de ancho, lo que las hace además de pesadas, difíciles de manejar, convirtiéndose en un reto para los fabricantes de puertas y para los proveedores de accesorios, quienes deben aplicar con mucha disciplina los principios ortodoxos necesarios para instalación de una puerta y sus elementos como son; sostener, controlar, cerrar y proteger las puertas, aquí toma importancia la conciliación indispensable entre la creatividad del diseñador y estos principios básicos, porque la funcionalidad de la puerta debe ser indiscutible, pues será la primera impresión que cualquiera tendrá del proyecto por lo tanto debe ser inolvidable.

Cada uno de estos principios tiene un tipo de elemento que permite que se cumpla, por ejemplo la función de sostener la puerta la cumplen las bisagras o pivotes, las primeras pueden ser las llamadas “tradicionales“ que permiten sostener puertas más livianas, pero para lo que nos convoca hablaremos de las del tipo incrustado u oculto, que permiten sostener el peso resultante en puertas de estos tamaños, cuando se mezclan maderas con estructuraras metálicas, pudiendo llegar a pesos hasta de 300 Kgs, lo que las convierte en monumentos planos que deben instalarse con total perfección, dando la sensación de que están suspendidas en el aire y la forma de medirlo es que se puedan empujar con un dedo sin importar su tamaño o peso.

El otro principio fundamental es el de cerrar y asegurar la puerta, función cumplida por las cerraduras, sobre las que entraremos en más detalle en algún otro artículo y sólo diremos que deben ser seleccionadas de manera que ofrezcan, no solo funcionalidad, sino la seguridad deseada, sin olvidar que durante el diseño debe tenerse en cuenta las especificaciones mínimas requeridas para su instalación, como es el espesor de la puerta y el área de instalación, para que tenga el espacio suficiente para poder hacer las perforaciones que alojarán la cerradura si problema, también debe tenerse en cuenta el diseño del marco, una vez más toma importancia la conciliación del diseño con los elementos disponibles para el cumplimiento de este principio, aquí debemos enfatizar que sino se diseña este aspecto con cuidado, se reducen las opciones posibles de cerraduras para instalar o inclusive llegaría a pasar que no se pueda instalar ninguna o que se tenga que hacer una reforma a la puerta.

El centro de nuestro artículo ha sido el papel de las puertas relacionado con las sensaciones y experiencias asociadas a su diseño, y ese papel no está únicamente determinado por la puerta en sí misma, sino por los elementos instalados en ella, que además de cumplir el principio de protección de la puerta, del que hablamos antes, deben ser el complemento perfecto para que se logre el objetivo con el cuál iniciamos el tema, y es donde se puede hacer la mejor combinación de formas, materiales y acabados para dar el impacto buscado con el diseño general de la puerta o de la entrada, aquí se pueden instalar desde manijas verticales con variadas formas y acabados, hasta manijas tradicionales o placas, todas con el fin de proporcionar un medio funcional para manejar y la vez proteger la puerta manteniendo su estilo y diseño, combinado con una manija interior que permita accionar la cerradura y al mismo tiempo abrir la puerta, que sostenida con las bisagras adecuadas debe trasmitir una sensación de seguridad, suavidad y comodidad al abrirla.

La arquitetura orientada a generar experiencias está alineada, entre otros muchos aspectos, con los materiales, formas y acabados de los elementos y que en el caso que nos compete, se instalarán en las puertas, siempre orientados a comunicar algo, lo que no solo debe lograrse a través de lo que vemos, que indiscutiblemente genera la primera impresión, sino también las sensaciones que se trasmiten a través de los sentidos como el tacto a través de las diferentes texturas, así como la sensación al accionar una manija, que a su vez acciona una cerradura, que permite abrir una puerta perfectamente sostenida, que funciona en forma súave y confiable, sin importar su tamaño o mejor, a pesar de su tamaño, también es una manera de proyectar la categoría del diseño y la construcción del proyecto complementando profundamente lo que se ve.

* fotos: 50 modern front doors Designs http://www.home-designing.com/2016/04/50-modern-front-door-designs